Mi nombre es Natalia Andrea Henao Agudelo y mi vida cambio desde el día que conocí a mi mentora Doralba Zapata. Ella llegó como llegan las sorpresas bonitas de la vida y la considero mi guía.

Con su terapia sistémica pude superar mis conflictos con mi niña interior y mi relación con mi mamá. Tenía muchos problemas frente a mi autoestima, seguridad y cómo enfrentarme con mis talentos y dones en la vida. Doralba me enseñó a darme valor frente las situaciones que iba presentando en el proceso de sanación; ya me amo y me aceptó tal cual soy. Ella me recordó que las manifestaciones y los milagros son posibles, y que podemos acceder a una vida con alegría y con propósito; a ella le debo que aprendí a reconocer mi misión y el amor por todo lo que hago. Estoy muy agradecida con sus excelentes terapias, ayudas, guía, despertar y acompañamiento. Doralba es una Diosidencia en mi vida. ¡La recomiendo mucho! Gratitud al cielo y a Dios por haberla puesto en mi camino. ¡Infinitas gracias! Por ella mi despertar consciente, me hace disfrutar todo proceso en mi vida y sin temores. Gracias, gracias, gracias.